8 de julio de 2012

Un mecanismo para la codificación de la memoria humana


Un equipo de investigación postula la teoría de que la memoria puede ser codificado en la estructura de tres dimensiones de la célula neuronal.
“La memoria se atribuye al fortalecimiento de las conexiones sinápticas entre las neuronas del cerebro, y sin embargo los componentes de la membrana sináptica son transitorios, mientras que los recuerdos pueden permanecer. Esto sugiere que la información sináptica se codifica y ‘cablea’ en otros lugares, por ejemplo, a nivel molecular dentro de la neurona post-sináptica. ”
“El equipo buscó en las estructuras a nivel del citoesqueleto de la estructura del cerebro. Encontraron componentes que encajan entre sí y eran capaces de crear el procesamiento de la información y la capacidad de almacenamiento que el cerebro necesita para formar y retener la memoria.”
Los microtúbulos rellenan el interior de las neuronas de nuestro cerebro, especialmente en los axones y las dendritas, donde se lleva a cabo la mayor parte de la actividad . Se investigó para averiguar si esta semejanza es accidental o no. Esto condujo a la generación de un modelo computacional muy exacto de la interacción entre CaMKII y microtúbulos. Parece que se ha encontrado un mecanismo de codificación de la memoria.
El citoesqueleto (también CSK) es un “andamiaje”  celular o “esqueleto” que figura en el citoplasma de una célula y está hecho de proteínas. El citoesqueleto está presente en todas las células,  aunque se pensaba que era único de los eucariotas, pero  investigación reciente ha identificado el citoesqueleto en procariotas.


5 de julio de 2012

Cómo guarda y rescata pensamientos el cerebro humano

Investigadores de EE.UU. se sumergen en los procesos de la memoria para descubrir cómo se graban los recuerdos y como se relacionan entre sí.

Por qué el olor a hierba recién cortada puede evocar el verano, o una canción a un buen amigo. Cómo se almacenan y recuperan recuerdos es un proceso del que todavía queda mucho por conocer. Se sabe dónde están, pero no las relaciones entre unos y otros. Un grupo de investigadores ha buscado las «huellas» de la memoria y ha descubierto que algunas personas guardan lo que aprenden de manera semántica, es decir, según su significado.

«Creemos que hay gente que almacena lo que aprende de manera semántica, otra que lo hace de según el momento de aprendizaje, y de otras muchas formas», afirmó Jeremy Manning, investigador de la Universidad de Princeton. Según él, conocer qué proceso sigue cada individuo permitiría diseñar estrategias para aprender más en menos tiempo.

El estudio, publicado en la revista Journal of Neuroscience, se realizó entre pacientes con epilepsia a punto de ser sometidos a una neurocirugía. Esto permitía conectarles electrodos directamente sobre el cerebro y estudiar su actividad neuronal con mucha más precisión. «Podíamos estudiar un área mucho más pequeña, y tomar datos miles de veces por segundo, algo imposible si no abres el cráneo», explicó Manning.

A los sujetos se les presentó una lista de 15 palabras a un ritmo de una por segundo mientras se medía la «huella» eléctrica que dejaba cada una de ellas. Después de un tiempo de descanso en el que hacían cálculos matemáticos —para centrar la mente en otra tarea—, se les pidió que las dijesen de viva voz, en el orden que quisieran. Los investigadores querían medir cuántos agrupaban las palabras que recordaban según su significado. Unos lo hicieron y otros no, por lo que dedujeron que no todo el mundo sigue la misma estrategia.

Recuerdos semánticos

 

Para saber si dos palabras tienen relación semántica —de significados— los investigadores utilizaron un modelo conocido como Análisis Semántico Latente (LSA). Éste analiza decenas de miles de documentos escritos y busca las palabras que suelen aparecer juntas. Por ejemplo, es probable que en cualquier texto sobre «martillos» se hable también de «clavos», pero en muy pocos aparecerá la palabra «ganso». Por tanto, «martillo» y «clavo» tienen más relación semántica que «martillo» y «ganso». Esta cercanía entre palabras se puede representar en una escala del 0 (ninguna) al 100 (su significado es el mismo).

El estudio reveló que algunos de los sujetos del estudio agrupaban las palabras en su cabeza según el modelo del LSA. A la hora de recordarlas, las más parecidas semánticamente aparecían juntas. «Los patrones mentales de cada persona forman una especie de ‘huella neuronal’ que permite saber cómo organizan sus recuerdos y pensamientos a través de las asociaciones entre palabras», dijo Manning. También afirmó que sus técnicas se pueden trasladar al estudio de distintas maneras de relación: temporal —según el momento de aprendizaje—, por tamaño, aspecto, textura y otras. «El problema ahora es que, de momento, sólo podemos ponerlo a prueba con pacientes con el cerebro al descubierto», explicó.
«Dada la importancia del lenguaje en el pensamiento humano, identificar una representación neuronal que refleje el significado de las palabras según se recuerdan nos acerca un poco más al esquivo objetivo de localizar los pensamientos», dijo Michael Kahana, otro de los investigadores.
Para avanzar en este proceso Jeremy Manning se ha mudado a la Universidad de Princeton para intentar desarrollar un método que permita continuar con estos estudios sin necesidad de cirugías invasivas. «Queremos desarrollar una técnica que permita resultados similares usando Imágenes de Resonancia Magnética funcional (IRMf)», afirmó. Aunque no se atreve a predecir cuándo estará lista, ni siquiera si lo conseguirán.

Tomado de:  http://www.abc.es/20120701/ciencia/abci-captura-imagenes-cerebro-humano-201207011802.html

21 de junio de 2012

El chicle del olvido

Los expertos afirman que masticar chicle empeora la memoria y la capacidad para memorizar de las personas, es decir, impide la fijación de la información en el cerebro humano. Esta fue la conclusión a la cual llegaron los investigadores de la Universidad de Cardiff en Gran Bretaña.

Las personas que mascaban chicle memorizaban con mayor dificultad el orden de sucesos, letras y números que las que dejaron ese hábito.

Los investigadores suponen que el movimiento de la mandíbula durante la masticación reduce la capacidad del cerebro para memorizar series de letras y números.

Este estudio también confirma el hecho de que las personas tienen dificultad para realizar varias tareas simultáneamente.

Tomado de:  http://spanish.ruvr.ru/2012_06_20/chicle-cerebro-humano-memoria/

La prodigiosa memoria de las cabras

Las madres reconocen la voz de sus crías hasta un año después de haber sido destetadas y separadas

 

La expresión «estar como una cabra» puede no hacer justicia a estos animales. Además de mantener relaciones sociales complejas, han demostrado tener una estupenda memoria. Las cabras no olvidan la voz de sus crías incluso un año después de haber sido destetadas y separadas, según científicos de la Universidad Queen Mary de Londres, los mismos que hace unos meses anunciaron que las cabras, como los seres humanos, también tiene acentos. La investigación aparece publicada en la revista Proceedings of the Royal Society B.

Los investigadores aseguran que las cabras madres recuerdan las llamadas de sus hijos hasta un máximo de 11 a 17 meses (de 7 a 13 meses después del destete). En la mayoría de las especies, los padres y las crías utilizan principalmente vocalizaciones para reconocerse entre sí a grandes distancias. El equipo estudió a nueve madres de cabras enanas y sus hijos entre 2009 y 2011. Grabó la llamada de los pequeños a las cinco semanas de edad y se las hicieron escuchar de nuevo a las madres entre los 12 y los 18 meses posteriores.

Los científicos descubrieron que las cabras madres no solo eran capaces de reconocer las llamadas de sus hijos a las cinco semanas, sino que todavía las recordaban por lo menos un año después del destete. Ellas no se equivocaban, distinguían a sus hijos después de tanto tiempo entre todo el rebaño.

 

Evitar el incesto

 

«Debido a las dificultades de seguir a los mismos ejemplares durante años, el reconocimiento a largo plazo ha sido estudiado en solo unas pocas especies. Nuestro estudio demuestra que los animales recuerdan a otros que para ellos son importantes», afirma Elodie Briefer, coautor del estudio.
Este comportamiento podría ayudar a las cabras madres y a sus crías a mantener relaciones familiares, y también podría evitar que las cabras madre se apareen con sus hijos, cuando éstos alcanzan la madurez sexual.

A largo plazo, el reconocimiento de sus miembros ayuda a mantener las relaciones sociales en el grupo. Esto podría ser particularmente importante en las especies que experimentan largos períodos de separación, como la migración o la hibernación, o que viven en sociedades complejas, como las cabras.
 
Los investigadores creen que la comprensión de las capacidades cognitivas de los animales domésticos es importante para el bienestar animal y para mejorar lo más posible sus condiciones de vida, especialmente si se tiene en cuenta que tienen una memoria tan larga. 

Tomado de:  http://www.abc.es/20120620/ciencia/abci-prodigiosa-memoria-cabras-201206201016.html

4 de junio de 2012

Los efectos del fumado en el cerebro y la memoria



¿Fumar daña el cerebro?


Según revela un estudio europeo publicado en la revista Biological Psychiatry, las personas fumadoras sufren un adelgazamiento de la corteza orbitofrontal. En concreto, los experimentos demuestran que cuanto más cigarros fuma al día una persona y más tiempo lleva siendo fumadora, más fina es su corteza cerebral en esta región. El adelgazamiento de la corteza del cerebro ha sido relacionado con el envejecimiento y la reducción de la inteligencia.

Además, según concluye Simone Kühn, investigadora de la Facultad de Medicina "Charite" de la Universidad de Humboldt (Alemania) y coautora del estudio, dado que la corteza orbitofrontal ha sido relacionada con el control de impulsos, la recompensa, y la toma de decisiones, su adelgazamiento puede aumentar el riesgo de adicciones. En consecuencia, fumar tendría un efecto acumulativo sobre el cerebro que hace que para los fumadores crónicos resulte cada vez más difícil abandonar el hábito.

¿Fumar daña la memoria?


Si te falla la memoria, es posible que hayas fumado demasiado este fin de semana. Así se desprende de un reciente estudio de la Universidad Northumbria (Reino Unido) que indica que los “fumadores sociales”, es decir, que solo fuman una media de 20 cigarrillos durante los fines de semana, normalmente en compañía de amigos y familiares, sufren daños en su memoria idénticos a quienes consumen tabaco a diario.

A través de una serie de experimentos, los investigadores demostraron que, tanto quienes fumaban siete días a la semana como quienes lo hacían solo dos de cada siete días, obtenían peores resultados en las pruebas de memoria prospectiva -que nos permite recordar acciones programadas-que los no fumadores. Tom Heffernan, coautor de la investigación que publica la revista Open Addiction, asegura que el deterioro de la memoria vinculado al tabaco se puede achacar a un declive cerebral acelerado y a que fumar encoge el cerebro.

Tomado de: http://www.muyinteresante.es/fumar-los-fines-de-semana-dana-la-memoria